En una ceremonia encabezada por Juan Larraín Correa, vicerrector académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y Mario Ponce Acevedo, decano de la Facultad de Matemáticas, se dio la bienvenida a los 1385 estudiantes que iniciaron su proceso de nivelación. 

El PIMU inicia cada temporada con la aplicación de un test de diagnóstico a todos los novatos que ingresan a la Universidad Católica.

El vicerrector académico, Juan Larraín, destacó el compromiso de los estudiantes que repletaron el auditorio Luksic para dar inicio a sus actividades universitarias con el objetivo de estar mejor preparados para para hacer frente a los cursos de matemáticos del primer semestre.

“El PIMU es un programa pionero que nació en la Facultad de Matemáticas, con un fuerte apoyo de la Vicerrectoría Académica de la universidad y también del Ministerio de Educación, y lo que busca es lograr una mejor inserción efectiva”, señaló. 

Y agregó, “cerca de 3.000 estudiantes rinden el test de diagnóstico al día siguiente de su matrícula, y de ellos, más de 1300 van a tomar los distintos programas de nivelación. Lo más importante, es que el seguimiento revela que los estudiantes que forman parte del programa tienen un rendimiento mucho mejor, y ese es nuestro objetivo. Otra señal de lo pionero que es este programa, es que la Facultad de Matemáticas lo está llevando a otras universidades”.

El decano Mario Ponce, también se dirigió a los estudiantes, para darles la bienvenida.

“Muchos se preguntarán por qué al ingresar los hacemos rendir una prueba de matemáticas y es porque, lamentablemente, todavía es necesario. Nosotros constatamos que, cuando no hacíamos nada, 1 de cada 2 de los estudiantes que ingresaban a la Universidad Católica, reprobaba un curso de matemática del primer semestre. No podíamos quedarnos tranquilos con que los mejores estudiantes de Chile estuvieran reprobando sus cursos de matemáticas de primer año y en respuesta a esto, desplegamos todos los esfuerzos para diagnosticar, nivelar y acompañar a los estudiantes de la universidad. Esto se tradujo en una mejora en las tasas de aprobación”.

Las actividades de nivelación se desarrollan durante el mes de enero y febrero, contemplando tres instancias de acuerdo con los resultados obtenidos y el tipo de curso matemático al que los alumnos deben enfrentarse en relación con sus carreras.

Posteriormente, durante el año, se desarrollan instancias de acompañamiento que contemplan tutorías, salas de ayuda matemática, que son instancias de consulta para los alumnos.

Sobre el Test de Diagnóstico

La aplicación del test moviliza importantes esfuerzos desde la Facultad de Matemáticas, que ejecuta la actividad. Este año se requirieron alrededor de 200 cuidadores y 80 salas para la rendición del test, rendido por 2882 estudiantes a través de distintas instancias de ingreso: Ingreso regular PSU, Talento e Inclusión, Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo, PACE; y cupo supernumerario BEA.

Gabriela Fernández, directora de Gestión Docente de la Facultad de Matemáticas, destaca los altos estándares de diseño y construcción del instrumento, que aseguran la validez y confiabilidad del proceso: “los test de diagnóstico en Matemática, son instrumentos que fueron diseñados y construidos siguiendo los más elevados estándares de confección de evaluaciones, incluso han dado lugar a publicaciones científicas”. 

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